Había una vez un niño llamado David que se llevo diez perros a su casa, sus padres no le dejaban pero al final si le dejaron. Había que ponerles nombres a los perros y su abuelo, Ismael, les puso nombres mediante adivinanzas. Los perros crecieron y descubrieron que eran galgos. Eran muy grandes y había que darlos, así que decidieron darlos a gente conocida. Al final solo se quedaron con el más grande, la madre de los perros.
Me ha gustado porque es divertido y salen perros, que me gustan mucho.
RETOS CANINOS 12
Hace 4 años
1 comentarios:
me a gustado tu resumen Miguel.
Alberto Muñoz Cañadas
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