Una historia con mil monos.

Eduardo Cuaresma era un doctor. Necesitaba monos para hacer desaparecer una enfermedad. En su ciudad no había zoológicos, entonces envió un telegrama a su amigo Jeremías diciéndole: Tráeme monos de África donde tú vives. Su amigo le envió monos, al siguiente día más y al otro más y tenía la casa llena de monos. Entonces probó con mandarle otro telegrama. El telégrafo era un poco despistado y se llamaba Zeca. Eduardo le dijo a Zeca que le mandara a Jeremías: Para de mandarme monos, y Zeca entendió: no pares de mandarme monos. Jeremías no paró. Eduardo Cuaresma estaba confuso y agobiado porque tenía su casa echa un zoológico, (los vecinos cuando pasaban por allí, decían que habían abierto en su ciudad un zoológico).
Eduardo le mandó otro telegrama a Jeremías diciéndole: para ya.Y el telégrafo le mandó otra vez una equivocación, y a Eduardo le seguía mandando monos. Y un día decidió marcharse, y dejó una nota en la que ponía: "Me marcho de esta ciudad. Todas mis pertenencias se las dejo a Zeca. Saludos". Y Eduardo Cuaresma no apareció nunca más por allí.
Este libro me ha gustado porque a mí me gustaría tener un vecino que tuviera muchos monos en su casa.